El uniformado estuvo en el cargo un poco más de 20 días, tiempo en el que pudo evidenciar el poder que tenían las bandas delincuenciales en la provincia, denunciarlo le costó el puesto.

William Calle, jefe de la Policía Nacional en la subzona de Esmeraldas, fue removido de este cargo después de que la semana pasada denunció el abandono estatal en que se encuentra esta provincia y aseguró que las bandas delictivas les habían ganado la batalla a los uniformados, pues están mejor armados y poseen en control absoluto de ciertos barrios y de la cárcel del sitio.

Tras las declaraciones del excomandante, el sábado pasado la cúpula policial y Juan Zapata, ministro del Interior, se trasladaron a Esmeraldas, desde donde desmintieron a Calle.

“Jamás el mensaje es de una policía debilitada, no podemos concebir que hemos sido sobrepasados por la delincuencia (…) lamento mucho las declaraciones en ese sentido”, afirmó Zapata, quien, sin embargo, confirmó una serie de acciones para resguardar la seguridad en Esmeraldas.